Artesana textil. Desde pequeña, aprendió a bordar en textiles de manta y algodón, una técnica que perfeccionó a los 15 años "a mano y con aguja". Elabora y comercializa la indumentaria que crea teniendo como premisa el valor de una trabajo bien hecho. También se ha dedicado a difundir el respeto por la labor de sus colegas artesanos, "porque cada trabajo se lleva un pedazo de los que elaboramos el producto", y a revitalizar el interés por esta herencia cultural en las nuevas generaciones.